"Mamá, lo siento por haber nacido. Pero no es mi culpa. Pronto me iré y no me volverás a ver": Emily se rompió en lágrimas

«Mamá, lo siento por haber nacido. Pero no es mi culpa. Pronto me iré y no me volverás a ver»: Emily se rompió en lágrimas

Emily empezó el primer grado. Su mamá le compró un ramo de flores y le trenzó el cabello. Todo parecía estar bien, pero Emily siempre sentía que su mamá, Lisa, a menudo se enojaba y le gritaba porque no la quería. La niña no podía entender qué estaba haciendo mal: era obediente y siempre ayudaba a su mamá, pero su mamá nunca estaba satisfecha. Un día, Emily