«Mi Suegro Se Oponía Firmemente a la Compra de Nuestra Casa, Temiendo que se Cortara su Apoyo Financiero»
Hace dos semanas, Victoria y su esposo Gregorio celebraron su fiesta de inauguración de la casa. Sí, tienen que pagar una hipoteca durante los próximos 15 años, y sí, todavía hay muchas cosas que arreglar en la casa. Pero el padre de Gregorio está convencido de que no deberían haber comprado la casa, temiendo que esto limite su apoyo financiero.