La Invitación Inesperada que Condujo a una Revelación Agridulce
A mis 78 años, siempre me he enorgullecido de mi independencia y buena salud. Sin embargo, una simple invitación de los niños del vecindario, Sebastián y Harper, condujo a una serie de eventos imprevistos. Tras una tarde encantadora, regresé a casa solo para encontrarme con una sorpresa que cambiaría mi vida para siempre. Esta historia desvela los giros inesperados que la vida puede presentar, incluso cuando crees que lo has visto todo.