Un capricho infantil termina una amistad: «Mi marido no pudo más y soltó: ‘¿No puede jugar sola o ver unos dibujos animados?'»
Me conecté a todas las plataformas de redes sociales y me di cuenta de que cada foto de perfil era de su hija. Me di cuenta de que estaba obsesionada con ella. Noemí acababa de tener su primer hijo.