A los 55 años, una repentina realización: Mi amor por ella se ha extinguido
La vida es impredecible y, a pesar de nuestros esfuerzos por dirigir su curso, puede sorprendernos con giros inesperados. Podemos creer que tenemos todo bajo control, solo para descubrir que nuestros valores y sentimientos cambian de maneras imprevistas. Esta es una historia sobre darse cuenta, cambiar y la compleja naturaleza de las relaciones a largo plazo.